No se si alegrarme o no, ya que a estas horas y tras escuchar las noticias de lo sucedido en la media maratón de madrid, con la muerte de un runner y la salida en ambulancia de nuestro compañero aquí en elche , se queda uno con una sensación extraña, pero hay que seguir adelante.
Al acabar la carrera tenía una sensación agridulce, dulce por la marca, he bajado el tiempo del año pasado, pero agrio por la sensación de cansancio al acabar y no poder hacer mi objetivo del 1,35, pero tras hablar con otros corredores quizás no era el día para ese tiempo.
Y sobre todo he recordado algo que no me volverá a pasar, el viernes por la tarde doné sangre y ya me dijeron que igual notaba algo de cansancio y es posible que fuera así, ya que el bajón me pegó en el kilómetro 11, demasiado pronto y solo el amor propio me ha hecho seguir y mantener un ritmo que me ha permitido hacer ese tiempo. Pero vamos a ser positivos y el ver a tantos del club y casi todos contentos con su resultado y tener a ese grupo de seguidor@s tan potentes se agradece, así como a nuestro lisiado particular que nos ha dado moral en esos momentos de flojera.
Si una conclusión saco de esta carrera es que en la media maratón de jumilla voy a reventar el crono y si no, pues a disfrutar la carrera que es al final el objetivo de todos.
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